lunes, 13 de agosto de 2012

El código del ADN da forma a nanoparticulas de oro.

Nuevo hallazgo permitirá producir estas nanopartículas con formas y propiedades predecibles, para destinarlas a múltiples aplicaciones específicas.
Un sorprendente estudio en el que han convergido metales y biología ha revelado que el código de ADN no solo da forma a los organismos, sino que también puede dárselo a las nanopartículas de oro (cristales finísimos de este metal con aplicaciones en diversas disciplinas). El hallazgo abre la posibilidad a la producción de nanopartículas con formas y propiedades específicas, destinadas a múltiples aplicaciones.
Un equipo de científicos de la Universidad de Illinois, en Estados Unidos, constató en diversos experimentos realizados con segmentos de ADN dirigen la conformación de, concretamente, nanopartículas de oro, que son cristales finos de ese metal cuyas aplicaciones se extienden a , la electrónica , la medicina o la catálisis .Estas síntesis nos pueden proporcionar una fórmula sencilla aunque novedosa de producción de nanopartículas con formas y propiedades predecibles.
Actualmente las nanopartículas de oro tienen amplias aplicaciones en biología como en ciencias de los materiales gracias a sus propiedades fisicoquímicas únicas.
Dado que estas propiedades vienen determinadas principalmente por la forma y el tamaño de las nanopartículas, resulta clave para controlar sus características para adecuarlas a aplicaciones específicas.

      KEVIN CIPOLLONE

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